domingo, 6 de enero de 2013

LOS REGALOS DEL 2012


Un día de estas Navidades, en el tiempo de oración, fui incapaz de centrarme en el contenido de la misma -el Evangelio del día, supongo- porque me venían recurrentemente al pensamiento multitud de “flashes” de lo vivido en el año 2012. Después de unos minutos de lucha, me rendí y decidí prestar atención a estos recuerdos que pugnaban por ser protagonistas. Los he llamado “los regalos del 2012”, me he quedado con uno por mes, y he pensado que compartirlos es una forma de agradecerlos y de prolongarles vida y efectos. Vamos a ello.

Enero. 

De las muchas cosas que viví en enero -supongo que unas cuantas... Tendría que mirar la agenda para saber si tantas o menos...- me quedo en este peculiar balance con un sorprendente curso de “Sexuación” (sic) -aunque el ordenador lo cambie a “seducción”, es otra cosa-. De la mano de Silberio Sáez y y Teresa Suárez, y con el sello de las cosas bellas y bien hechas que acompañan al movimiento Comunión y Liberación, disfruté de una jornada en la que quedó claro que nuestra condición sexuada es un grito potente del creador que nos llama a amar como Él, a vivir la Comunión que de Él emana. El curso terminó con una breve representación de “El Diario íntimo de Adán y Eva” de Mark Twain, y por tanto, con una sonrisa en los labios. El Señor nos ha hecho bien... Bienaventurados los que viven su sexualidad desde la luz del Amor. Infelices los que se han hecho un ídolo de lo que en realidad es un símbolo. Los que quieran descubrirlo, que se sumerjan en la Teología del Cuerpo del Beato Juan Pablo II.



Febrero.

Después de casi dos años de sacerdote, me llegó el momento de impartir mis primeros Ejercicios Espirituales, esa suerte de predicación de la Historia de la Salvación que busca que el ejercitante se convierta y oriente su vida de modo definitivo hacia su Dios y Señor. Apasionante pero nada sencillo. En febrero ayudé al P. Antonio Izquierdo en una tanda con una veintena de jóvenes. En marzo ya me tocó a mí solo con una veintena de adultos, eso sí, todos muy buenos. El resultado... Dios y cada participante lo sabe. Al predicador le quedó buen sabor de boca, por lo que este 2013 repetiremos.  
Marzo. 

Junto a los Ejercicios ya citados, marzo trajo momentos muy intensos de trabajo y gozo. Destacamos la primera semana de cine espiritual en mi diócesis, que organicé junto con Andrés GG. Maktub y Popieluszko fueron las películas que hicieron presentes el Misterio a través del celuloide. 
Y también en esa semana se disputó el primer Torneo de la Amistad de fútbol-sala en Leganés, que organicé con la ayuda de los buenos amigos que me ha dado el fútbol: Eugenio González y Josele Martínez.
Cine, fútbol, amigos... Y en medio Dios.



Abril.

Siguiendo con el esfuerzo de selección, de este hermoso mes me quedo con el curso de comunicación de la Universidad Santa Croce de Roma, donde -de la mano del P. José Antonio Medina- me lancé más de lleno a la evangelización del “continente digital”, como bautizó el Papa Benedicto XVI a este nuevo “lugar” o “modo de ser” que ha inaugurado Internet y que nos envuelve, y nos irá envolviendo cada vez más. Poner el soplo del Espíritu en esta nueva “atmósfera”, hacer presente la gracia de Cristo, su Palabra, su Iglesia, es un desafío apasionante al que me lancé sin paracaídas a partir de abril



Mayo. 

Y el aterrizaje se llama “redes sociales de la diócesis de Getafe”. Lanzamos Twitter y Facebook al hilo de Pentecostés, y hemos intentado difundir ese viento fresco, a veces impetuoso y arrebatador, otras brisa suave que calma, por medio de estas herramientas de comunicación e intercambio. Y en eso seguimos.



Junio.

El mes de las bodas. Toqué a dos por fin de semana, y eso que en mi parroquia se casa poca gente. Lo mejor, sin duda, es conocer a las parejas, saber su historia, ver cómo la vida les ha juntado. El reto: intentar que Dios esté más presente, que les sustente, que les enseñe a amarse. En un futuro muy próximo, sólo se casarán los que crean en Dios, porque no hay otra forma razonable de prometer amor eterno si no es en manos del Eterno que es Amor. Los que viven así, gozan y perseveran; los que no, drama, a veces tragedia. Encomiendo las bodas de junio, y las de todos los que un día unieron sus vidas ante el Altar.



Julio.

En medio de un campamento divertido y salao, llegó la noticia del año, la que esperábamos con más ansia: la liberación de nuestra amiga Ainhoa Fernández del Rincón, cooperante secuestrada en Tinduf el 22 de octubre de 2011. Por ella habíamos rezado, habíamos escrito a diario un blog de amigos, habíamos acompañado a su familia... Y al fin fue liberada. En el link de diciembre podéis escuchar lo que dije de ella hace unos días en la radio.



Agosto.

Después de unos días creciendo en amistad en Cádiz con hermanos sacerdotes, a mediados de mes, otra gran y sorprendente noticia: un buen amigo mío, doctor en Física, emprendedor, trabajador capaz e incansable... Se iba al seminario a sus casi 33 años, al de mi diócesis. Sorpresa y una inmensa alegría porque Juan Luis Valera ha recibido una llamada muy especial del Señor, exigente pero inmensamente gozosa. Le seguiremos la pista.



Septiembre.

Un nuevo curso pastoral siempre ilusiona: proyectos, grupos, actividades, personas... Y detrás, el Señor. A veces surgen iniciativas con las que no contabas, que te sorprenden y te llevan. Eso me pasó con iMisión, una plataforma católica para evangelizar en la Red. Ya no era sólo actuar de francotirador en unas redes tantas veces ajenas -cuando no hostiles- al hecho cristiano, sino trabajar uniendo esfuerzos e ideales por hacer presente el Reino, y eso sonaba mejor, más estimulante, más conforme al plan de comunión que tiene el Jefe. Y detrás del proyecto, siempre, las personas: un grupo formidable de religiosos, laicos y sacerdotes enamorados del Señor. Un regalo inesperado: www.imision.org




Octubre.

Dos regalos: ver la ordenación sacerdotal de tus compañeros de Seminario. Chavales que has conocido “de paisano”, en Móstoles, en Fuenlabrada, con sus “pintillas”, con sus despistes, y con la grandeza de decir “me hago cura, y que sea lo que Dios quiera”. Patxi, Juanma, Rafa, de presbíteros. Álvaro, José Manuel, Bernardo y Manuel, de diáconos. 
Y el otro regalo, el proyecto “Rompiendo Moldes” en Radio María. Un programa joven para anunciar que Cristo vive a través de las ondas, con la razón iluminada por la fe como herramienta, y el sentido del humor como música de fondo. Es muy fácil hacerlo con gente como Cristina Lozano, Carmen Desmonts, Beatriz López-Roberts, Gonzalo Castillero, Josué Villalón y -de nuevo- Patxi Bronchalo. Si queréis reíros, pinchad el link de diciembre...







Noviembre. 

Del 1 al 4, en Valencia, participé en un espectacular congreso de pastoral juvenil convocado por nuestros obispos que reunió a más de dosmil responsables de la evangelización juvenil en España. Y sopló el Espíritu, y nos aseguró que “sin Mí no podéis hacer nada”, y que hay que poner a Jesús en el centro de nuestras vidas, y de nuestros grupos y proyectos. Que hay que adorarle, y entonces habrá fuego, y habrá misioneros, y contemplativos, y esposos que transmitan la fe y la vida, y habrá Iglesia. Ojalá sepamos acoger estos vientos, estos signos de los tiempos, y ponerlos en práctica, porque el mundo se muere por falta de Cristo.



Diciembre.

Mis padres participaron en un “Cursillo de cristiandad”, invitados por un servidor, que lo vivió meses antes. Y ha sido muy hermoso ver renovar la fe de los que a mí me la transmitieron, y que redescubran que la vida se puede vivir “de colores”. Y en eso estamos todos. Ojalá el 2013 nos traiga más al que lo hace “todo nuevo”, todo mejor.



Os dejo con el link del último “Rompiendo Moldes” que hace un peculiar balance del 2012, por si queréis reíros un rato, quién sabe si emocionaros también.